miércoles, febrero 01, 2017

Llueve afuera...

"Llueve afuera, sí... y también dentro de mí, lloro por ti, porque tú te has marchado y jamás volverás. Estás lejos de mí, sin tu amor, qué dolor, la tristeza me invade y no se marchará". Así decía una canción que cantamos alguna vez, en una clase de canto. Hoy la recordé, mientras viví un episodio cómico-mágico-musical en la oficina. Sucede que, justo a la hora que salgo a comer, estaba lloviendo, así que opté por esperar a que escampara un poco. Casi 40 minutos después, dejó de llover, casi hasta salió el sol y emprendí la caminata hacia casa... pero ni siquiera logré llegar a la puerta de la universidad, cuando la tormenta había regresado. Volví a guardarme y volvió a dejar de llover. Mientras tanto, esa canción estuvo en mi mente toda la tarde... y no es la primera vez que me pasa.