domingo, febrero 01, 2009

camino a San Juan

Vi pasar peregrinos con los ojos llenos de fe y los pies llenos de ampollas, los vi con sus lámparas de noche en la orilla de la carretera, caminaban y caminaban y caminaban, de vez en cuando se detenían donde había gente con fogatas para regalarles café, agua o naranjas.




2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué bonito! A mí me asombra la devoción de las personas, la fe y todo aquello que nos mueve para buscar el amor... sí, pienso que eso es...

Dorix dijo...

Es impresionante :D