viernes, noviembre 20, 2009

no sé cómo decirte que he perdido los zapatos otra vez...

Vaya día tan extraño. Madrugar en viernes no pesa cuando el grupo de las 7 es adorable, impresionada estoy con la claridad mental, el trabajo duro y la actitud de diversión perpetua de esos alumnitos; sospecho que los voy a extrañar. Extrañaba enclaustrarme en la biblioteca por la mañana, entre el olor a libros y el ruido de hojas, de pasos y de dedos que teclean o voces que susurran. Todo iba bien, pero en algún momento tuve sentimientos encontrados, palabras que no sé si fueron las mejores y dos que tres asuntos pendientes. Por si algo faltara, un mensaje que desearía no haber recibido me dejó pasmada, ¿que quién ya no está dónde? Snif. Sabe a pollo, menos conocido como Mauricio Benjamín, me hace el día; cita textualmente algo que dice que dije el día de mi examen de maestría: "susto de la vida" (Flores, 2009). Quiero ir al cinito, pero casi todo es Luna nueva y he de decir que me da flojera. Creo que terminaré viendo La Sirenita en el teatro, ja, ni cuando era niña fui, iré ahora a ver a la sublime actuación del hijo de una amiga apenas un poquito mayor que yo (la amiga, no el chavito). Quiero ir a la FIL, quiero ir al ITESO, quiero ir al DF, quiero vagar en el Chepe, quiero vacaciones... y a la vez no.

La frase del título, por cierto, es de una canción de Nena Daconte.

2 comentarios:

Tony Valderrama dijo...

Si vienes a GDL avisa, a ver si nos vemos.

Anónimo dijo...

En verdad parece que te agarron varios asuntos a la vez. Escribir es buena forma de ir tomando uno en uno y solucionarlos.

Anda, empieza haciendo planes para las vacaciones, que están aquí en un mes! =)