jueves, octubre 06, 2005

pasajeros neuróticos

El camión iba de Monterrey a Guadalajara, yo subí en Zacatecas para venir a Aguascalientes, escuché balazos, muchos, el ruido ensordecía, vi las caras de angustia de los pasajeros, iban todos medio acostados en los bonitos asientos reclinables, encontré un lugar, me apropié de él y entonces vi lo que tenía neuróticos a los otros veinte pasajeros: una película con largas larguísimas escenas de balaceras, explosiones y otras curiosidades; a eso, sumemos que el camión iba casi lleno y llevaban varias horas de viaje y les faltaban otras seis, tanta humanidad concentrada en un camión (aunque sea un maravilloso Volvo de Ómnibus de México, amplio, limpio y cómodo) deriva en un non grato olor a chetos.

1 comentario:

Laudanum dijo...

jajajajajajajaja
los chetos güelen rico.
Besos.