sábado, mayo 21, 2011

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El calor extremo en la sala me hizo pensar que la tonta profecía se había cumplido, el mundo se había acabado y yo había terminado en el infierno (seguro por tanto berrinche innecesario, tal vez por el tipo aquel que me culpaba de su sufrimiento, quizá por los que han sido víctimas de mi cuasi-nula paciencia, en fin, si algo sobraba eran las hipótesis). Error, el mundo seguía girando y aquello no era el infierno en sí mismo, sino los infiernitos que por momentos se crearon entre poetas que discutían sobre la literatura en-de-desde Aguascalientes (lo que sea que eso signifique). A diferencia del mundo, el festival sí se acabó y todos corrimos por un poco de aire.

3 comentarios:

Angie dijo...

doris:

tratare de creer que estuvo interesante
mmm no pude ir andábamos difundiendo el festival.

por cierto, otra vez felicidades!!!
ahhh
que emoción
y como te sientes o que sientes, ahhh

bye

LUDA dijo...

jajajaja justo estuve pensando lo mismo acerca del infierno y los infiernitos :P Pero creo que, tratándose de literatura, de pronto me sale un poco lo optimista. Por lo menos, yo trato de encontrarle el lado bueno al asunto.
Me dio gusto verte ahí.

Dorix dijo...

Aki: Interesante estuvo. Gracias muchas por las felicitaciones. Siento que debo dormir ahora todo lo que no dormiré después, ji ji ji.

LUDA: Me dio gusto estar ahí y escucharlos a todos (a unos más que a otros, sobra decir), me dio gusto echar chisme acerca de los infiernitos, ji ji.